LOS ASISTENTES A ENADE aplaudían sin saber que es lo que aplaudían, que duda cabe. Desde luego, nadie tenía idea de lo que el Sistema Danés se trataba. Eñl Minstro al oir tanto ruido viajo a Dinamarca y dejó a medio Santiago colgado y pensativo. Saltaron los tapones y
Concordando con don Carlos Peña, siempre agudo y preciso, hay acá un aspecto cultural importante e insuperable. Efectivamente como en Chile existe un debilitado y pobre espacio sindical frente un más fuerte y amplio representativo empresarial, ¿cómo se conciliaran las posiciones ante nuevas aspiraciones de ambos sectores? Tendríamos , obviamente, al Estado supliendo al resto de trabajadores no sindicalizados y sin representación y a un sector empresarial negociando político-empresarialmente con el Estado. ¿Que resultaría de aquello?
Saludos cordiales,
Rodrigo González Fernández
Observatorio politico.blogspot.com